26.10.05

Boicots

No me gustan los boicots, pero tengo sensaciones encontradas. 

Hay gente que se los ha tomado en serio, y eso es probablemente lo que más le agradaría a la tropa de la Esquerra; que puedan decir en Cataluña que el resto de España los odia. Eso está claro. También es cierto que a mi lado morboso le hace gracia. Tanto reírle las gracias a la clase política catalana los empresarios y siempre sin sufrir ninguna merma en su cuenta de beneficios. En fin, epsero que impere la cordura.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

La verdad es que esta cuestión no la termino de tener clara.
Por una parte Cataluña prosperó principalmente gracias al anterior regimen (autarquía) que les concedió a los empresarios catalanes todo el “solar” para sus negocios, sin posibilidad de comprar los mismos productos mucho más baratos en el extranjero. Actualmente las exportaciones al resto de España suponen una cifra aproximada al 80%.
Esta es la razón principal por la que Cataluña se enriqueció y no tanto por el fenómeno de la inmigración, que es consecuencia de lo anterior y lugar común.
Por otra, el boicot supone tirar piedras sobre nuestro propio tejado: La recaudación en Cataluña supone alrededor del 20% y tiene un peso muy importante en la economía española. ¿Pero si aprueban L’Estatut?
Lo dicho, no lo tengo nada claro.

Anónimo dijo...

Ha oído nunca la COPE? Parece que no.

Anónimo dijo...

A mi modesto parecer, la autarquía protegió a muchos negocios, algunos sitos en Cataluña y otros en el resto de España, pero no creo que los catalanes fuéramos los grandes beneficiados. Tampoco los más perjudicados.
La apertura de los mercados y el tiempo han puesto las causas perdidas en su sitio.
En cuanto al boicot, no se que se lo que desde algunos sectores se pretende conseguir, pero al final los más perjudicados seremos todos los consumidores ya que el mercado esta muy entrelazado. A ERC le va de perlas, ya que ha creado un frente común contra los catalanes y ahora esperan conseguir en Cataluña otro frente anti-español para mostrarse como “los salvadores de unos españoles malísimos que solo quieren la aniquilación de los catalanes”.