5.2.09

Ni al que asó la manteca

Pensábamos que ya estaba superado lo de incentivar la demanda por la vía presupuestaria. “Son cosas que ya no se le ocurren ni al que asó la manteca, porque no sirven en realidad para nada”, nos contaba el añorado profesor Calle en las clases de Hacienda Pública en la facultad.

El caso es que el gobierno decidió montar una especie de Plan contando con las Administraciones públicas más filibusteras del país, las locales. El resultado puede verse consultando una aplicación que el propio MAP ha colgado en Internet. Podrá ver, desocupado lector, en qué se va a gastar su Ayuntamiento el dinero que a usted le está endeudando hasta límites que resultaban impensables (de momento el 5,8%, y subiendo) hace apenas cinco años.

No deje de buscar su municipio y, si procede, no deje de pedirle cuentas a su Ayuntamiento.

 

PD: los datos son los datos, dígalos Agamenón o su porquero.

 

Ps: Respecto al estado de las finanzas, él mismo [Francisco Martínez de la Rosa] contaría que poco después de llegar [al gobierno en 1834], hizo llamar al tesorero general para averiguar de qué fondos disponía. “Este funcionario me respondió –y no lo olvidaré jamás- que había 37.000 reales en mala moneda de caja”.

Citado por Pérez de la Blanca Sales, Pedro: Martínez de la Rosa y sus tiempos. Ariel, Barcelona, 2005. Página 306.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Anda, que tardais en vuestro pueblo en colaborar con Mister Bean para que os asfalte una calle...

Menos mal que todavía quedan pueblos honrados en Castilla que decimos que se meta la deuda por donde le quepa.