5.12.12

¿Es James Bond?


A vueltas con SkyFall.

No soy capaz de hacerme un juicio claro de la película. Es un buen thriller, sin duda. Sam Mendes es un magnífico director, y es capaz de transmitir un aire de melancólica decadencia a todas sus películas, un aire que casa muy bien con los escenarios (aquellas tierrasaltas de leyenda) de la película. El protagonista es un hombre cansado, más en la línea del personaje que interpreta Kevin Spacy en American Beatuy, o al de Tom Hanks en Camino a la perdición. Estos personajes en el fondo hastiados de la vida que llevan, con la amargura prendida en el fondo de su alma. Películas de buen guion y bien resueltas. En este sentido, para quien no haya visto ninguna película de la saga Bond, se SkyFall es una película de agentes secretos superior a la media.
El problema, claro, llega porque no es una película de espías. Es una película de James Bond. Y Bond es otra cosa. Es ese espía elegante, cínico y desacomplejado, que acumula amantes, disparos y martinis. Es el último refugio de una masculinidad maldita que nunca llegamos a conocer y cuyos estertores alcanzamos a ver nomás que en sus películas. Bond será un destroyer con las mujeres o no será. Sin rasguños en la cara, con sus trajes impolutos. Este Bond que vuelve a la casa de sus padres y que reflexiona de manera freudiana acerca de su relación con M me interesa más bien poco como personaje, la verdad.  
Por que ese yo no James  Bond.
Y no sé quien se cree que es Mendes para pegarle este viaje al personaje hasta dejarlo irreconocible.


PS: John Hugh MacLennan  escribió “Sientes que nadie más que Dios ha estado nunca allí antes que tú, pero en un valle desierto de las Highlands sientes también que todos aquellos que un día importaron están muertos o ya se fueron

2 comentarios:

Drizzt dijo...

La posdata de su post, me ha recordado un viaje en Diciembre de hace unos años por las Tierras Altas, subiendo por la carretera -por llamarla de alguna manera - que une Ullapool con Durness. Recuerdo con bastante nitidez la sensación de soledad y melancolía, y sobre todo el pensamiento, pero sobre todo me pregunto como se ganan la vida y viven allí ....

Anónimo dijo...

James fue al garete desde que le pusieron a esa jefa mal encarada. La puñetera mania de que al macho hay que educarle. Coño, como si a estas alturas de la tortilla fueramos gordos bebecerbezas atados a un sofa. Al final lo han convertido en un castrati depresivo que no interesa a nadie.
Joao Pires i Barrio